jueves, 14 de enero de 2010

De vuelta a Bangkok

Esta mañana salíamos de Krabi hacia Phuket para coger un avión a Bangkok. Después de haber estado toda la noche oyendo un cerdo, o yo que se que coño era… nos despiertan Camilo y Linita con cara de “la hemos cagado”. Resulta que el check out del hotel es a partir de las 10h, pero nuestra hora de partida era a las 7h. Acojonaos, empezamos a buscar a gente para que nos dejen irnos (tenían el pasaporte de Camilo padre), parabamos a todos los ojos rasgados que encontrabamos. Al final, ya con las esperanzas bajo 0, empiezan a llegar… con calma… mucha calma. Deprisa y corriendo pagamos y nos vamos pitando para el barco. Lo conseguimos. Llegamos a Bangkok a las 15h más o menos. Cogimos un taxi oficial que nos costó 450 Bth y nos dejó en Kao San. Allí habíamos reservado habitaciones en un encantador hotel, Cozy Guesthouse, estamos acostumbrados a un nivel… que bueno, mientras haya cama y vater, ¿para qué más? Por la tarde ibamos a que, por fin, Camilo padre lo gozara un poco en el Pantip Plaza, que es un centro comercial de 4 plantas dedicado a la informática y cacharritos varios. Llegamos a la conclusión que se podrían haber ahorrado 3 plantas, porque por todo había lo mismo. En temas tecnológicos Tailandia está bastante más atrasada que España, imaginate que no sabían lo que era un libro electrónico, que fuerrrrte, justamente lo único que quería Camilo. Como era el cumple de Cami, ¡Felicidades amor!, él elegía la cena, sushi. Fuimos a un japonés de Kao San en el que ya habíamos estado, ¡ojo al cenicero de la foto! El sushi… un asco, el arroz caliente, Camilo padre que casi pota, Linita volvió a pedir un “fucked”… no aprendemos. Después paseando hacia el hotel, Camilo padre se volvió loco comprando navajas. Se compró dos cuchillos para sus paseos por la montaña, ahora podrá serrar árboles y matar a quién se le ponga por delante. Nos vamos a dormir que mañana tenemos sesión de compras compulsivas.



Desayunamos y vamos a la sastrería que hay pegada al hotel. La intención es comprar dos abrigos, uno para Camilo padre y otro para Alberto (las medidas del de Alberto las cogían con Cami, pero cuando les explicábamos que en verdad eran 10cm más de altura y mínimo 20cm más de brazos... el sastre flipaba, se debía imaginar a un hombre-árbol). Regateo agotador y bueno, quedan encargados, veremos si el cachemir es cachemir o qué. Nos dirigimos hacia Siam, lugar en el que se encuentran los centros comerciales. Entramos en uno, no me acuerdo el nombre, pero al ver que no valía todo de 2 a 4 euros nos fuimos pitando, madre mía… yo no sé que va a pasar cuando volvamos a España. Vamos pa´ el MBK, que es más nuestro estilo. Camilo padre empieza fuerte comprandose una mochila que, lo juro, cabemos 2 personas dentro… por el módico precio de 25 euros… ¿cuánto aguantará la mochila?, calidad-precio… ya veremos. Yo le compré a mi peque hermano un par de cositas guapas y para nosotros unos cuantos trastitos más. Ah, se me olvidaba, cayó otro cuchillo… ya tiene trés, veremos que pasa en el aeropuerto, igual lo detienen… atención al video, no tiene desperdicio. Agotados volvemos hacia el hotel que a las 7h los Camilos se tenían que probar sus abrigos a medida. Llegábamos tarde y Cami enredaba regateando con los taxistas 25 céntimos de euro… ¡cómo estamos! Probadita de abrigos, parece que están bien, los hacen en 24h, a ver… Vamos a hacer la cenita de despedida a Kao San, como no. Vamos a nuestro bareto con música en directo, genial, ved el video. Camilo padre super animado… Linita, pobreta super triste, y Cami, para variar, cagándose. Después de cenar vamos a un bareto que tocaba musica heavy en directo, Cami atasca el vater. Camilo padre más animado todavía, pedimos cócteles a piñón… ¡video! Al irnos hacia el hotel encontramos uno de los famosos carritos con bichos. En todo el viaje no habíamos visto casi ningún español, de repente, alrededor del carro nos empiezan a hablar todos en castellano. ¿Será el efecto bicho que nos atrae? Todos, “Venga pruebalo que están buenos…” Sí, sí pero nadie los comía. Al final Cami, con dos cojones… bueno mejor véis el video.

A la mañana siguente… Cami cagó ¡bichos, sapos y culebras! Pobrecito mío. Pero reto superado, que es lo que importa. A todo esto, Linita le iba diciendo a Camilo padre, “¿me enseñas la reserva del vuelo para ver a qué hora sale?, respuesta “Que sale a las cinco coño, no te preocupes”. Un par de mini compras más tarde, Linita por casualidad coje el papel de la reserva y atención… ¡el vuelo salía en una hora! Tiempo de llegada al aeropuerto en taxi: 1 hora. Con prisas y a lo loco nos despedimos, no dio tiempo ni a lloros ni a nada, se suben al taxi del tio de la recepcionista del hotel y van a probar suerte. No la hubo, perdieron el vuelo y se anularon los dos siguientes, a dormir en el hotel del aeropouerto. Adiós Camilo y Linita, os echaremos de menos, nos lo hemos pasado genial.



Cami y yo estamos solos. Teníamos reservado un bus y barco para ir a Koh Tao que salía a las 8h de la tarde. Hacemos tiempo por Kao San. Fuimos a una peluquería a que Cami se rapara y yo aproveché para hacerme la manicura, precio: 200Bth todo (4 euros). Comimos y estuvimos por internet un rato. Cervecita… mala cervecita, me dio migraña y casi poto. Como faltaban un par de horitas para irnos, decidimos hacernos un masajito. Cami se hizo uno de espalda y cabeza y yo uno de pies, que al final te daban por todo… pero bueno. Mi primer masaje, yo ya les avisé que no me hicieran daño, así que lo pude aguantar y puedo decir que me gustó bastante. A las 8h estabamos delante de la agencia para que nos recogiera el bus. Allí conocimos a Mr. Chang… bueno, Mr. Chang tiene historia. No se llama así, pero le hemos puesto este nombre, ya sabréis porqué en nuestras aventuras hacia Koh Tao. Ahora nos quedan por delante 10h de bus y 3 de barco. ¡Nos vemos!



Videos:

http://www.youtube.com/watch?v=UzmPk8VgnxU

http://www.youtube.com/watch?v=SvM21lV80oU

http://www.youtube.com/watch?v=h0q2uAQd5O0

http://www.youtube.com/watch?v=N4c_0K3tw0c

1 comentario:

  1. JAJAJAJAJA,dios que gracia con el cuchillo, jajaja.
    Camilo,como puede saber un gusano a marisco...
    Venga, que os lo paseis bien,un abrazo...

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