sábado, 3 de abril de 2010

El claxon de Hanoi

¡Estamos en Hanoi! Primeras impresiones… ¡diferente! A las 9 de la mañana llegábamos al aeropuerto y antes que nada había que hacerse con billetes vietnamitas, los Dongs. Hemos sacado, ni más ni menos, que 5 millones de dongs, ¡vamos sobrados! En realidad son solo doscientos euros, pero mola mucho esto de hablar en miles y millones, jaja. El taxi “oficial” hacia el hotel nos ha cobrado en dólares, 15 exactamente, un palo. El hotel está en el centro del Barrio Antiguo de Hanoi, se llama Hanoi Gecko Hotel. De camino al hotel, mirando por la ventanilla del taxi, flipábamos con el tráfico. No hay normas de circulación, cientos de motos y coches circulan a su bola, esquivándose unos a otros, tocando el claxon sin parar. Para cruzar las calles, los pasos de peatones no tienen ningún valor, se trata de lanzarse a la carretera, con paso firme y esperar que los vehículos te vayan esquivando. Llegamos cansadísimos al hotel, las recepcionistas son encantadoras y nos invitaron a un café mientras esperábamos a que acabaran de limpiar nuestra habitación. Cuando por fin pudimos subir a la habitación, sentimos una especie de orgasmo de felicidad, es increíblemente bonita, moderna, limpia… dios… no habíamos estado así de cómodos desde que salimos de España. Encendimos la tele y nos tumbamos en la cama, nos quedamos dormidos hasta por la tarde, momento en el que salimos para comer algo en el Little Hanoi y luego volver a nuestro refugio. Sólo habíamos reservado 1 noche, pero pensamos que nos merecemos un descanso de cutreces y hemos alargado la estancia a 3 noches más, y total por 19 euros con desayuno e internet incluido…


Al día siguiente, nos sentíamos como nuevos y después del desayunar salimos a hacer el circuito a pie que recomienda la Lonely Planet por el Barrio Antiguo. Bueno… que decir del recorrido este, al principio bonito, empezamos por el Lago Hoan Kiem, con su puente rojo y un pequeño templo. Seguimos para ver el monumento a los revolucionarios mártires y adentrarnos en la locura de calles del Old Quarter. Después de 1 hora viendo calles, que si calle de zapatos, calle de juguetes, calle de verduras, calle de especias, calle de su puta madre… ya estábamos hasta los huevos y empezamos a atajar. Buscábamos desesperadamente una cafetería llamada Baguette et Chocolat, que según la Lonely está increíble. Andamos la calle unas 5 veces y ni rastro. Nos rendimos con gran puteo y cagándonos en la puta guía y andamos hasta la catedral de San José. Genial, estaba cerrada, lo mejor… ¡justo al lado había un restaurante con tapas españolas! ¡Atención al video! Muertos de cansancio nos fuimos a dormir la siesta. A las 8 teníamos entradas para ver las famosas marionetas de agua. Después la cabezadita y ver un par de episodios de Lost (¡nos los podemos bajar, viva!), nos vamos hacia el teatro. A Cami le encantaron las marionetas… todo el rato me decía, ¿Cuánto falta? ¿Cuándo acaba?, jajaja. No, en serio, están graciosas, hay que verlas. Y bueno, esto ha sido todo de momento. Hanoi es bonito, pero aún estamos un poco morriñosos de Koh Tao. ¡Mañana más!

PD: Estamos viendo en el canal National Geográfic un puto documental de Jamón Ibérico… madre mía…

Videos:

http://www.youtube.com/watch?v=RPXporYV0aE

http://www.youtube.com/watch?v=VYUZMl2g7rY

Posted by Picasa

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