Lo sentimos de veras, somos unos vagos en esto de actualizar. Pero tranquilos, nuestro viaje continua y con él, este fantástico blog. Os dejamos con el cumple de Morgan y la pelea de Steve. Pues bien, vamos por pasos. El cumpleaños de Morgan fue una de las mejores fiestas que nos hemos pegado en Koh Tao. Outi, su novia, quería organizarle la mejor sorpresa y la verdad que lo consiguió. Todo empezó con unas cervecitas en Buddha Bar, para después cenar un poco en Tropicana. Outi había comprado una magdalena en el 7 Eleven y unas velitas, y yo, de estrangis, fui a las camareras para que cuando les hiciera una señal, apagaran las luces y le trajeran la “tarta”. Morgan se emocionó mucho, con todos cantandole el “happy birthday”. Después de eso, volvimos al Buddha Bar porque se empeñó en regalarnos un cubo (ya los conocéis, malditos cubos) cada dos personas. Teníamos sólo 10 minutos para bebérnoslo, ya que a las 10, marchabamos a Sairee, para la segunda sorpresa de Outi. ¡Un espectáculo de travestis! Más cubos y 2 horas de risas sin parar. ¡Camilo estaba eufórico! El momento cumbre fue al final del show, cuando las bailarinas agarran a Morgan y se lo llevan al camerino, lo disfrazan de tia y sale con ellos a hacer la canción final, ¡WMCA! Increiblemente gracioso. Cogemos un taxi que nos intentaba estafar, Cami con lo regateador que es con los taxis (Camilo y Linita, esto lo sabéis bien), estaba indignado. Al final nos llevó hasta el Captain Karaoke por 500bths, con la condición de que nos esperara y siguiera la ruta. El momento karaoke fue surrealista, nos metemos en un antro thai, sólo había una familia de tailandeses, cenando. Le pedíamos la lista de canciones al jefe y no nos la daba, hasta que no pedimos cubos no nos la quiso enseñar. Que remedio, más cubos. Cami y yo empezamos con “Livin la vida loca” de Ricky Martin, el resto ya lo veréis en los videos. Mucha, mucha, mucha risa. La familia thai se acabó pirando espantada. Cami sudaba a nivel boda, imaginaos (luego averiguamos el porqué de tanto subidón). Ya afonicos, nos vamos al Castle Party. El hijoputín del taxista, nos esperó pero nos quería volver a cobrar. Pedro y Gorka indignados deciden ir andando, Cami, Jenna y yo les seguimos. El problema es que yo había perdido las chanclas hacía un par de días, y tajada, de noche y sin zapatos no era el plan más inteligente. Ningún problema. Lo volvimos a dar todo en el Castle, y después de un par de cubos más, Cami sin camiseta y loco perdido, nos fuimos a casa dando tumbos. ¡Cumpleaños increible! Dos días después, desayunando en el Buddha, Steve (concentrado para su gran pelea), nos comentó que el Red Bull en Tailandia lleva anfetaminas. Ahora entendemos el pelotazo y la resaca durísima.
¡Llegó el día del combate! Cenamos una pizza con Pedro en Farango y luego nos tomamos un helado por Sairee. Al llegar al estadio, Pedro se da cuenta de que ha perdido la entrada. El pobre tuvo que dar media vuelta e irse a casa. Dentro del estadio estaba todo Buddha View, había que animar a Steve. El tio estaba en estado de shock, concentradísimo a muerte. A mi el boxeo este no me gustó nada, me da cosa ver a la gente pegándose y aparte ponen una música super loca. Yo me senté en unos escalones para jugar con unos perritos y de repente, Steve se me acerca con cara de pedo y me dice, “Necesito un Red Bull”, ¡jajajaja! El combate fue un poco tongo, ganó Steve, pero el Thai era mucho más bajito que él. Intentaré subir el video.
Y bueno, hemos estado muy liados acabando el Divemaster. Pero ya lo tenemos finiquitado. Un par de inmersiones más y listo. Este viernes es nuestro Snorkel Test. Estoy acojonada. Vamos a preparar una coreografía con la canción de los cazafantasmas. Lo hacemos con Outi, Morgan y Pedro. Luego tendremos nuesto momento Team Spain, ¡Cami, Pedro y yo la vamos a liar con Paquito el Chocolatero! Bueno, esto es basicamente lo que hacemos. Actualizamos de nuevo desde Bangkok y después… ¡Vietnam! ¡Besos a todos!